Así me sentía hasta diciembre del año pasado, convencido de estar depresivo y sufrir vientos de episodios de ansiedad o ataques de pánico, me sentía fracturado, con necesidad de ser reparado, desde mi interior gritando a los 4 vientos “ayuda”. No me escuchaban o igual sí, sufrí,pero luché por estar, estar aquí,  en este mundo, creo que para arreglar o crear algo especial, una de las cosas que me hacía estar bien, fue fotografiar árboles rotos, caídos o “fracturados” como yo en ese momento, la idea de regalarles una segunda vida “eterna” plasmada en una foto, porque si o sí acabarían fundiéndose en el bosque, deshaciéndose hasta desaparecer de la vista de cualquier persona que quizás alguna vez o más de una lo admiro. Me da paz ese sentimiento de regalo y en aquellos momentos, como si de una meditación profunda se tratase mis males desaparecían, agradecido estoy de las herramientas que encontré para sobrevivir a esa etapa , absolutamente terrible, el silencio me acompañó a veces hasta dentro de mi cabeza lo conseguía, ummm no era ansiedad , eran infartos, muchos infartos . 

Seguiré en otro momento, al igual a esto de escribir le cojo gusto . 

Fracturado ? Pero muy fracturado estuve. 

Gracias Vane por tu paciencia, por estar.
Gracias  Luis por luchar sin cuartel. 

feliz día o noche